Angeles & Demonios

Todos o casi todos conocemos la serie de libros del escritor Dan Brown que poco a poco se ha encargado de mellar en nuestras mentes religiosas a través de sus libros pues bien, como cinéfilo empedernido que soy, os traigo el teaser/trailer de "Angels & Demons" que a simple vista parece más de lo mismo que El Código Da Vinci pero pero que no guarda cierta relación con su predecesor. Esta vez Robert Langdom se enfrenta a una secta religiosa "Los Iluminatis" que pretenden arrasar con el cónclave papal...

Mencionar que esta vez tendremos a un Tom Hanks con mejor aspecto capilar y a un Ewan McGregor en el papel del joven cardenal que pretende mediar en el conflicto de asesinatos,enigmas y demás lindezas religiosas.

Los 6 de Oceanic han vuelto... para regresar a la isla

Por fin ha salido la promo de la quinta temporada de Lost, y sinceramente me he alegrado bastante por cómo lo han planteado y por las nuevas imagenes que han puesto, simplemente es increible... el regreso será en el 2009... la dura y la larga espera...

Trick r' Treat

Quiero salirme de la tangente y hablar de algo diferente esta vez (renovarse o morir?), es sobre esta película que tiene una curiosa historia a simple vista pero que pasa más allá de la típica película americana de miedo para halloween, rodada y finalizada en el 2007 (¿por qué llega a USA después de un año de su finalización?) con un presupuesto normal (no hablamos de una superproducción hollywoodiense), con un reparto sencillo y marcado quizás por la presencia de Anna Paquin (El Piano), una estética que muchos calificarán de huerfana (véase el juego de palabras con la película El Orfanato) de no haber sido por que esta película ya se rodó mientras El Orfanato seguía en pie. En fin, nos cuentan cuatro historias que suceden en la noche de Halloween cada una por separado o en una misma linea de tiempo, a cada cual más misteriosa y maléfica...

Juzgad vosotros mismo por el siguiente trailer... ¿merecerá la pena?

Más al sur del Edén

Sexo, follar, cojer, coitar, fornicar, trincar, mojar el pizarrín, bañar la nutria, echar una canita al aire, ñaca ñaca, hacer el amor, pasar el plumero, echar un polvo, el mete saca, sobar el tuerto, traca traca, rellenar el pavo, partir al medio, chingar, echar un casquete, matar el oso con puñaladas, tarari tarari y un largo etcétera…

Miles de sinónimos podemos encontrar para la definición de lo que comúnmente conocemos como la reproducción del acto sexual, o como me gusta denominarlo, ¡vamos a follar!, porque como ya nos dijo Fernando Tejero en Fuera de carta, "El idioma español a la hora de insultar es muy rico y extenso".

Y es que no llegamos a comprender cuan valioso es follar y permitidme el atrevimiento pero correrse es lo mejor que Dios nos ha podido dar, una pena que sus representantes en la tierra nos lo quieran limitar constantemente para la procreación de la especie humana en fin… no me adentrare en tierras pantanosas y me limitare a seguir con el tema del sexo.

¡Si señores y señoritas! hay que saber disfrutar del buen sexo, correrse como mínimo una vez al día para desahogar las penas pasadas y venideras, controlando los excesos y sabiendo donde tenemos el imite sexual. ¿Sabéis cuantas calorías se pierden en el sexo?, ¿Cuántas terminaciones nerviosas intervienen a la hora del orgasmo?, múltiples beneficios son los que nos ofrece el sexo o el onanismo en su defecto, es decir aliviar las tensiones, mejorar el estado anímico, depresiones, mal humor, disgustos, problemas matrimoniales, de parejas e incluso problemas con amigos o de carácter social. Nadie puede infravalorar este don que se nos ha dado, desde la monogamia a la poligamia pasando de la heterosexualidad, homosexualidad o bisexualidad, matizando en las miles de filias sexuales que nos llegan a provocar excitación o morbosidad.

No nos podemos quejar ¿eh? tenemos muchas opciones en las que elegir aunque algunos dirán que ciertas opciones no se les ha pasado por la cabeza y por lo tanto no tienen esa "libertad" de elección, yo sigo difiriendo con esto sinceramente, creo que tenemos todas las opciones a la palma de la mano la cuestión es saber que tenemos que descartar y que saber aprovechar en un momento dado.

Aun así existen muchas limitaciones, biológicas, sociales, psíquicas e incluso físicas que me entristecen al ver como cada vez la moral y el corazón tienen que batirse en duelo en miles de cuerpos pre adolescentes, maduros y seniles que cada día se preguntan por qué escogieron el camino tan arduo lleno de decisiones superfluas, de explicaciones que no tienen que dar a nadie.

¿Pueden ellos disfrutar del sexo igual que tú? me gustaría pensar que si, pero a que precio…

Fi/esterotipos

Saber identificar los momentos absurdos de la vida, comprobar que se repiten como patrones genético sociales y sobretodo auto-ayudarte a solventarlos pasando de ellos.

Una fiesta, gente, alcohol, buena música, conversaciones y drogas bajo cuerda son las notas que tiñen de monotemático los comportamientos humanos, de hecho hace poco tuve la ocasión de ir a evento social donde me lo pasé francamente bien, sin matizar mucho en el entusiasmo genérico y comprobé que hubo momentos de silencio absurdo e idiota, porque los que habíamos allí no nos conocíamos mucho, éramos casi extraños en una tierra virginal.

En ese momento me dije, ¿Por qué tienen que suceder estas cosas? con lo fácil que es salir del bache y empezar una conversación anormal o divertida, pero los asistentes de esa fiesta optaron por la aptitud pasiva provocada por el alcoholismo, aburrimiento o la ignorancia de no saber que decir o hacer, en serio, patético.

Ahora os explicaré como solucionar estos momentos:


OPCION A: para empezar sí no conoces a nadie tu mejor opción es observar quien de la fiesta es la persona más excéntrica y sonsacarle información acerca de los asistentes. Una vez conseguido la información vas haciendo una búsqueda exhaustiva de personas afines a tus ideales o gracias varias, una vez localizadas intenta hablar de algo genérico con ellos, evita sacar temas como el tiempo, los estudios o cualquier tema en el que te defiendas muy bien, deja que tus nuevos amigos se sientan importantes dándote lecciones de sabiduría callejera. Cuando ya tengas a tus nuevos amigos, haz de buen anfitrión y ayúdales en sus problemas con la fiesta, que necesitan una cerveza? un tinto? tú eres su mejor opción y poco a veras que nace una complicidad etílica superior entre vosotros.

Llegado el momento oportuno, sácale un tema que sepas que puedes rebatirles con mejores armas, abstente de cosas como política, filosofía o religión. A continuación dale lecciones de tu vida y dile que le comprendes y sabes de buena mano por lo que está pasando.

Cuando aparezcan las primeras señales de confianza, es un dato que nos interesa porque denotará que le has hecho algo de mella en su absurda persona y claro, es importante saber que puedes confiar en esa persona para la fiesta. Luego tienes la misión más difícil elegir las palabras correctas para el resto de “sus amigos” cosa que a la ligera nos será un poco difícil (ya se sabe que ganarse a un colectivo inculto, es más arduo que a una persona decente).

¿Listos?, cuando tengamos a la persona más afín, tras haber conseguido a sus amigos con las típicas bromas hacia tu persona y sus chistes de cliché, nos tocan los últimos pasos: buscar un medio de conexión entre tu el resto de los asistentes de la fiesta (y como no, tus nuevos amigos) y lo conseguirás usando un medio básico para toda persona “normal” de tu edad, la música y el baile.

A todos nos gusta contonearnos sin saber cómo lo hacemos, hasta el culo de alcohol, comida y demás lindezas de un gobierno químicamente tratado, así que cuando hayas conseguido arrastrar a todo el mundo para bailar, hablar y solucionarles sus tristes vidas, habrás conseguido solventar esos silencios absurdos que se producen porque nadie tiene la iniciativa suficiente para hacer que una fiesta sea amena y diferente.


OPCION B: pasar de todo, centrarte en ti mismo y tu ostracismo temprano, comer, beber y follar si se diera el caso.

Y así podrás decir que sobrevivistes a las mejores fiestas jamás creadas.

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Yo nunca he podido sentir esa necesidad, como miles de voces escondidas susurrándote… así eres en realidad y luchas contra la presión, una creciente necesidad que te engulle como una ola, pinchando, provocando y obligándote a alimentarla… pero los susurros aumentan, hasta convertirse en gritos y son la única voz que oyes… la única voz que quieres oír… y estás a merced de ella, de esa sombra de ti mismo… de ese oscuro pasajero.

Dos en la carretera

No recuerdo cuando empezamos a caminar juntos ni cuando supimos que la inocencia se nos derrumbaba a nuestros pies, no consigo comprender cuando se nos acabó los pases para la felicidad ni cuando hicimos uso de ellos. No pude ver la diferencia entre el deseo y la obsesión que significaba poder besarnos cada día.

¿Sabrías decirme el momento exacto en el que comenzamos a delirar y a echarnos tanto en falta?, ni yo lo sé.

El tiempo supo corregirme aquellas palabras que en su día te dije, me sobraron pocas exclamaciones y me faltaron muchos sentimientos por decirte cuando cruzaste la línea entre tú y yo.

¿Aún lo recuerdas verdad?

Recuerdo como contábamos historias que nunca juramos decir a nadie, que solo podían ser nuestras, trazando líneas en las estrellas para recordar el camino de vuelta si uno de los dos se perdía. Recuerdo como nos gustaba reír y saborear cada momento como si fuera único e irrepetible sabiendo que tarde o temprano acabaríamos discutiendo por quien contaría nuestras anécdotas cuando hubiésemos muerto.

No recuerdo nada, porque ahora mismo mis recuerdos, lo único que me queda en esta vida se fueron con tu silencio, tus miradas vacías, tus curvas saliendo de mis ojos cada vez que querías darme celos. Queríamos tenerlo todo en lo que tardo en escribirte estas líneas para decirte que, aunque no te conocí todo lo bien que pude, aunque no supe decirte cuanto te extrañaba cuando salías por las noches a buscar en los rincones de tu oscuro amor, quiero que sepas que estoy llegando a la certeza de que me equivoque al pensar que seríamos efímeros y eternos el uno con el otro.

Nunca supimos jugar con las posibilidades que el destino nos ofrecía y ahora es demasiado tarde, ya es demasiado tarde para recordar que una vez nos queríamos y que teníamos suerte de habernos encontrado el uno con el otro.

Porque una vida sin ti, una eternidad de soledades.

A tus recuerdos y los míos.

Falsa Apariencia

Mi hermana tiene razón no le cuento mis problemas, ni a nadie. Mi padre me enseñó el secretismo la independencia y a tener una buena reserva de bolsas de basura, por suerte nunca se me ha resistido ningún problema excepto ese pequeño resquicio del pasado, me asusta. Mi madre sigue queriendo ver su visión de su idolatrado hijo enmarcado en alguna pared pintada de rosa, algún día le contaré un par de verdades.

Por supuesto, siempre veo los problemas de los demás con más claridad que los míos y afortunadamente he podido lograr contener todo ápice de sensacionalismo en los líos ajenos y observarlos de forma paulatina e indiferente, siendo objetivos.

Mantengo mi obsesión con alcanzar un estado de neutralidad en el equilibrio de mi vida, miradme sigo un fantasma de las navidades pasadas pero sin billete de regreso al presente y por desgracia en el pasado no se puede hacer mucho, solo mirar. Debería de ir a que me miren la cabeza, no sé, a ver si encuentras petróleo u oro y así poder vivir de mis ideas todo lo que me queda de vida, no tengo equilibrio.

Desde que tengo uso de conciencia, sabía que la tendría limpia de no usarla y que me comería por dentro la idea de no tenerla.

No me es suficiente, no me basta con tener una buena posición psíquica y hacer alarde de usarla para el bien general, o en su contra de hacer cosas de mal gusto que no deleitarían a nadie. Me ganaré enemigos con el paso del tiempo debido a mis bolsas de basura, pero ¿quién quiere bolsas de basura?, solo son piezas de mi inexistente felicidad.

Hoy voy a matar a alguien, lo sé. Lo llevo pensando desde hace muchísimo tiempo y creo que tengo a mi victima localizada, estudiada y aislada, pasa desapercibida para todo el mundo, no te fijarías ni en un millón de años.

Lo tengo claro, esta noche sacaremos más bolsas de basura.

Oda al olvido

Sabias tener todo aquello que siempre quise tener, entre el eufemismo y la incoherencia supiste desear el mal que yo albergaba con tanta fuerza, de tanto correr hacia un lado no pudimos ver el abismo que se ceñía ante nosotros atento a cada golpe de mar furioso.

Nos criamos queriendo ser águilas volátiles que surcaban deseosas los cielos en busca del infinito, nos criamos creyendo que las peleas solo eran parte del camino para forjar nuestras armas, nos sentábamos juntos porque así podíamos luchar codo con codo para combatir a las burlas de nuestros compañeros, nos reíamos de los fallos de cada uno evitando que se descubrieran nuestros secretos. Guardábamos todo el odio cuando nos sentábamos a jugar.

Aprendimos que las palabras cambio, lugar y distancia tenían un peso tan duro que nuestras conciencias no lo soportarían, aprendimos que una mirada valía más que muchas de las mentiras que nos solíamos decir y que con el paso del tiempo descubriríamos que nuestras mentes ya divergían por otro camino, aprendimos a decir que si a todo y menospreciar el poder de la negación de nuestro alrededor. Guardábamos todo el rencor cuando nos sentábamos a charlar.

Maduramos con el devenir de las llamadas perdidas, los mensajes no devueltos y los encuentros superficiales de bar, comprendimos que ya teníamos una edad para recordar y añorar lo que fuimos y lo que nos gustaría haber hecho. Guardábamos toda la envidia cuando nos sentábamos en nuestras casas.

Ahora recuerdo con añoranza, cuando nos sentábamos en aquel viejo sofá a ver la televisión y sonrientes nos peleábamos por cada broma o situación inquietante, pasando las palabras a las manos y de las manos a tirarnos al suelo. Para luego descubrir que nos hallábamos atrapados en un ciclo de tu cuerpo con mi mente, de mi locura con tu indiferencia, de tus proposiciones y de mis negativas. Solíamos hacer que nadie nos veía, que etiquetábamos las esquinas con nuestros pasos, que volábamos a través del océano y burlábamos al tiempo. Guardábamos todo el amor cuando nos sentábamos en la cama.

Todo lo que nos guardamos ahora resurge como un sentimiento cruel, una mezcla de mí fanatismo por lo ocurrido y tú obsesión por ocultar lo evidente.

Guardábamos las palabras te odio y te necesito cuando ya nos era demasiado tarde.